"Te Esperaré" Capítulo 57

Peter se había ido hace ya un buen tiempo y no me había mandado siquiera un mensaje de texto para saber que estaba todo bien, pero yo tampoco quería preguntarle porque sabía muy bien que necesitaba su tiempo y su espacio para estar tranquilo.

Inesperadamente mis dos mejores amigas llegaron a casa contentísimas porque estaba mejor y aunque me preguntaba quién les había contado, conseguí mi respuesta en cuanto vi la risa de mamá y escuché los comentarios de agradecimiento de ambas hacia ella.

Acompañando a ellas también trajeron a mi pequeña sobrina Rufina. Esa niña tenía algo angelical que hacía que el mundo a su paso se volviera feliz tal cual lo decía su orgulloso tío y padrino. En cuanto la tomé en mis brazos ella se rió y me llenó de besos y algo parecido a un recuerdo que jamás viví me abordó pero no le di mucha importancia.

*(Flashback: Me levanté y fui con Rufi a caminar, le canté esa hermosa canción que le había cantado Peter hace unos días y ella se calmó, me tomaba de la mano y me miraba. Moría de amor con esos ojitos tan lindos fijados en mí. La verdad era tan hermosa, era un angelito y se parecía mucho a su mamá y a la vez a su tío. Por un instante al verla imaginé cómo sería Allegra, tendría esa naricita de porotito de Peter y esos ojitos verdes. Sonreí como una tonta.

- Lali: qué linda sos, te parece mucho a tu tío Peter. ¿Sabes que con él algún día te vamos a dar una hermosa prima? –ella la miraba y sonreía- Seguro que no lo entendes ¿no? –sonrió-)

El día lo pasé entre risas, juegos con la pequeña, charlas, chismes y el infaltable mate con medialunas que le encantaban a Euge. La verdad que con ellas se me pasaba el día volando compartiendo.

-  Cande: me parece que vos estás comiendo más de lo normal eh –le comentó a Euge-

-  Euge: ay, ¿qué decís? Como igual que siempre –rió y miró a otro lado-

-  Lali: si ella siempre come bastante –dijo mientras jugaba con Rufi a las muñecas en el piso-

-  Euge: ¿qué quiere decir eso Mariana? ¿que como mucho? ¿Qué estoy hecha una vaca? –dijo un tanto afligida-

-  Lali: no nada que ver, no te aflijas.

-  Euge: si me aflijo, ¿estoy muy gorda? –se miró- no como más.

-  Majo: -interrumpiendo- ¿no será que te pasa algo más? –miró a Euge comprendiendo lo que pasaba-

-  Cande: ¿qué pasa? –miró a ambas-

-  Majo: no sé –se hizo la desentendida y siguió con sus cosas riendo para si misma-

-  Euge: creo que… estoy embarazada

-  Lali: -la miró deteniéndose en el juego- ¿crees? ¿y qué esperás para hacerte una prueba?

-  Euge: -dijo nerviosa- tengo miedo… Rufi es muy pequeña aún y no sé Nico es el papá perfecto pero por ahí le molestaría.

-  Lali: ¿estás loca? El rubio está hecho para ser padre, seguro va a estar feliz, tenes que hacerte ese test ya, no esperes más.

-  Cande: estoy de acuerdo con Lali, si queres yo voy a comprar y vuelvo –sonrió- No mejor nada de queres ya vuelvo –se levantó rápido, buscó su cartera y salió disparada del departamento-

Al final Euge se hizo el test y era una falsa alarma lamentablemente, pero estábamos felices porque en ese momento estábamos todas para apoyarnos, como lo haríamos en cualquier situación. De todas formas el buen tiempo que pasamos juntas se tenía que terminar en algún momento y cerca de las 19hs. primero la rubia con su pequeña hija luego la castaña se tretiraron de casa dejándome sola con mamá.

-  Lali: ma me voy a bañar, si Pitt llega antes ¿le decís que me espere por favor?

-  Majo: dale, le digo.

Luego  de hablar con mi querido amigo me sentí más relajado y tranquilo por lo sucedido y ya estaba listo para llevar a cabo el plan que habíamos enmarañado durante el almuerzo; pero primero debía ir al último ensayo, por lo que me bañé y cuando estuve listo salí de casa con el bolsito donde llevaba todo lo necesario para los próximos días.

El tránsito era un caos a esa hora pero suerte aún me alcanzaba el tiempo para llegar al teatro a las 16hs. En un punto donde tuve que parar a esperar que los vehículos avanzaran le mande un mensajito a Lali diciendo: “Todo arreglado mi amor. Luego te cuento con más detalle todo. Esta noche no te olvides que vamos a lo de mamá. Te amo”. Unos minutos después recibí la respuesta de ella diciendo: “bueno ahora te toca estar tranquilito amor, y sí, ahora nos vemos. Te mandan un beso Mona, tu hermana y uno más especial y enorme tu sobrinita ♥”. Sonreí y por último le mandé un mensaje diciendo: “mmm, ¿jodeme que están todas? qué lindo. Mándales un saludo a ellas también y te mando un beso enorme a vos también princesa. Te amo” “Ah, dile a Euge que vaya a la casa de nuestros viejos a cenar, por fis”

Ulteriormente el tránsito se descongestionó un poco y pude llegar a tiempo al ensayo. Y una vez allí, hice pruebas en el escenario para ver qué habría y también probamos las luces y la acústica del lugar. Por suerte tanto los chicos como el director estaban muy felices por los resultados logrados y yo no podía sentirme más agradecido y ansioso porque fuera ya el gran día.

Luego de despedirme de todos me retiré, no sin antes pasar unos minutos por el que sería mi camarín a cambiarme ya que debía pasar por Lali.

Me bañé tranquila y feliz porque a pesar de todo lo que sucedió la vida parecía al fin encaminarse y en esa nueva oportunidad tenía la dicha de estar con el único hombre que realmente amaba como a nadie.

Cuando hube finalizado mi baño, salí y me lookeé con algo que habían elegido La China y Mona para mi. Se trataba de un vestido colorado y unos zapatos de color dorado que hacían juego con mi cartera. Me hice unas ondas en el cabello, use un maquillaje claro y no muy sobre cargado, me delineé los ojos y para finalizar me pinté los labios de rojo carmesí.

Cuando estuve lista fui al living y no pasaron más que unos minutos para que él apareciera. Tocó el timbre y mamá lo recibió. Al verme se sorprendió y se deshizo en piropos y halagos que yo agradecía mientras lo miraba.

Sinceramente no podía estar más caño. Vestía una remera de color blanca lisa con escote en v, unos zapatos marrones y casualmente un pantalón rojo que hacían juego a la perfección con mi vestido.

-  Lali: ¿cómo sabías como iría vestida?

-  Peter: no lo sabía ¿por qué lo mencionas? –sonrió-

-  Lali: porque estamos a tono, ¿tu hermana te dijo que iría así? –insisitió-

-  Peter: no –rió- me parece que ahora te leo la mente –miró su reloj- bueno ¿vamos yendo?

-  Lali: dale –miró a su mamá- ma ¿bajas con nosotros?

-  Majo: no, yo bajo por delante así despisto a los periositas, uds bajen por el garaje del edificio.

-  Lali: wow, lo tenías todo planeado, sos una genia. Gracias –le dio un beso-

Nos despedimos los 3 y con Lali bajamos por donde Majo nos indicó y salimos con mi auto a toda prisa. Charlamos un ratito de cosas vanas, ya que la gran conversación la teníamos que tener en otros términos, y en un satiamen ya nos encontrábamos en la casa de mis padres.

Ingresamos y todos los miembros de mi familia recibieron con alegría y extrema efusión a Lali, cosas que no faltaron en toda la cena por suerte.

-  Bauti: y… Lali –dijo comiendo el postre- ¿vos estás de novia con mi hermano, o hay chances para mi?

-  Pepo: uh, mala ahí, no se sabotea a un hermano…

-  Tato: y menos a uno tan enamorado –agregó riendo-

-  Euge: y tan estúpidamente celoso –rió-

-  Peter: ¿me dijiste estúpido?

-  Euge: lo de celoso lo pasaste por alto y no te molesto eh –rió-

-  Peter: es que lo soy, además Lali está conmigo –sonrió mirándola y la tomó de la mano- ¿no amor?

-  Lali: quién te dice, por ahí Bauti te gana y es mi novio primero –sonrió al ver que su novio se enojó un poco-

-  Bauti: yupi, te voy a ganar –le sacó la lengua divertido-

-  Peter: -rió- avísame cuando crezcas más a ver si entras en competencia…

Y así seguimos entre peleas, bromas y muchas, muchas risas que se multiplicaban a cada minuto y me hacían sentir más feliz. Era como si el tiempo nunca hubiera pasado y aún fuera parte de la familia Lanzani.

-  Peter: bueno nos vamos –dijo despidiéndose de todos- ¿les di sus entradas a todos? –preguntó dudoso-

-  Claudia: si hijo, nos la diste a todos –sonrió- ahora vayan que es un poco tarde y tienen que descansar –abrió la puerta- vayan despacio y pónganse el cinturón.

-  Peter: sí mamá –sonrió y revoleó los ojos sin que ella lo vea-

-  Lali: -viéndolo le dio un pequeño golpe en el brazo- hasta mañana Clau –sonrió y se despidió-

Salieron de aquella casa y casi sin saber cómo volvieron al departamento y luego de cambiarse se fueron a dormir tranquilos. Y al día siguiente todo pasó muy rápido también, hasta que Peter se tuvo que retirar para ir a hacer un último repaso en el teatro. Y un par de horas después se les unirían sus familiares y amigos.

Él día había llegado para que Peter volviera a brillar sobre las tablas y yo no podía contener mi emoción por verlo. Me trasladé al teatro y obviamente los periodistas estaban esperando que me presentara pero yo decidí no dar ninguna nota, no por ahora y mi vocera y salvadora fue Euge, quien sin pelos en la lengua les pidió que se tranquilizaran.

Ya dentro del teatro Tabaris nos acomodamos en nuestros respectivos lugares y luego empezaron a ingresar el resto del público, pero junto a mi había un lugar vacío que fue llenado por él, tiempo más tarde.

Pasó la primera parte de la obra y luego él se retiró para cambiarse y vocalizar. Un par de canciones y escenas más tarde llegó la parte en que debía cantar Peter junto a Matías y Fer. Entró a escena y todo el teatro empezó  a vibrar.

Cantó como los dioses y la rompió como siempre. A mi me daba alegría verlo así haciendo lo que más le gustaba. En un minuto me miró y cantó la parte que decía:

“Yo soy tu voz, tu verdad 
Soy tu realidad 
El que un día llegó 
Y el que no se va”

Salí completamente emocionada y con la piel de gallina junto al resto de la familia de él. Nos sacamos un par de fotos y Euge y Nico dieron un par de notas. Al instante Tincho me apartó y me dijo que teníamos que hablar.

-  Tincho: tengo que decirte algo…

-  Lali: ¿qué pasa? ¿por qué tanta urgencia?

-  Tincho: es que… vení mejor –la tomó del brazo suave y la llevó afuera- tengo que enseñarte un lugar.

-  Lali: no, pero yo tengo que esperar a Peter para irnos a casa

-  Tincho: es que él justamente me pidió que lleve a tu casa porque… -pensando- eh… se iba a retrasar un poco.

-  Lali: para, me despido de todos entonces.

-  Tincho: pero si hablas con ellos mañana… dale Lali vamos.

-  Lali: ¿por qué tanto apuro? Me estás asustando ¿pasó algo grave?

-  Tincho: -abrió las puertas del auto- subí que te explico en el camino.

-  Lali: ok –subió-

En todo el camino intenté sacarle una palabra pero no lo logré así que me dediqué a apreciar el camino y en un momento me di cuenta  de que nos dirigíamos a Ezeiza, definitivamente no entendía nada.

-  Lali: ¿qué hacemos acá? –preguntó bajando del auto-

-  Tincho: seguí este camino y vas a encontrar tu respuesta- le indicó sonriendo-

Seguí el camino que Martín me indicó y me encontré con una azafata que me comentó que tenía que subir a una avioneta privada y me entregó un recado. Lo abrí y lo leí: “Seguro te parece muy extraño esto pero pronto me encontraras. Te estoy esperando. Te amo. Siempre tuyo JPL”

Sonreí y me acomodé en mi asiento y al cabo de una hora más o menos estábamos aterrizando en otra ciudad. Cuando bajé lo busqué con la mirada y me sorprendí al verlo de traje esperándome con ramo de flores enorme.

-  Lali: -acercándose- amor ¿qué hacemos acá? ¿dónde estamos?

-  Peter: -sonriendo- en San Martín de los Andes y vinimos a… -miró su reloj y observo que ya eran más de las 12- a pasar San Valentín amor. ¿te sorprendí? –peguntó-

-  Lali: demasiado –sonrió y le dio un beso- ¿eso es para mi? –mirando el ramo de flores-

-  Peter: todo para vos es amor –se lo dio- ahora vamos –le tomó la mano y bajaron de esa terraza- tengo una sorpresa más para vos.

-  Lali: ¿otra más? –lo miró incrédula-

-  Peter: sí –terminó de bajar junto a ella de la terraza y luego encontraron a un departamento- ta-da –encendió una luz tenua y se pudo ver un camino de pétalos de rosas exparcidos por el suelo y veloncitos alumbrando el camino que los conducía a una mesa romántica-

-  Lali: me muero ¿esto lo hiciste para mi? –lo miró descreída e ingresó emocionada hasta aproximarse a la mesa- está increíble mi amor, sos el mejor del mundo.

-  Peter: qué bueno que te guste princesa –sonrió y la siguió- espero que puedas disfrutarlo todo –la tomó de la mano-

-  Lali: -giró y lo miró a los ojos- está increíble esto, no puedo creer lo romántico que sos amor ¿cómo lo preparaste todo?

-  Peter: eso es un secreto –sonrió, tomándola por la cintura-

-  Lali: bueno respeto tu secreto –puso sus manos alrededor de su cuello y le dio un pico- ¿y me tragiste para cenar acá nada más?

-  Peter: no, -sonrió y los ojos le empezaron a brillar- te traje para que pasemos un tiempo sólos, juntitos, en un lugar romántico –la tomó por las mejillas- y porque me parece que es el momento especial para pedirte formalmente esa oportunidad que prometiste darme.

-  Lali: ¿la oportunidad de qué? –dijo desentendida mientras sonreía-

-  Peter: de que seas mi novia de nuevo. Aunque en realidad no es lo único que quiero pedirte –sacó una pequeña cajita de su bolsillo- Este tiempo me di cuenta que no puedo vivir más sin vos, que cada segundo que pasa te necesito a mi lado para ser feliz, y vos sabes que nosotros y nuestros corazones no entienden de tiempo, que hacemos todo cuando debemos hacerlo, por eso yo … -le mostró la cajita y luego la abrió-quiero pedirte que nosólo seas mi novia sino que seas mi prometida, porque yo ya viví muchísimas cosas y me di cuenta que la única mujer a la que quiero seguir amando por el resto de mis días es a vos. Quiero que a partir de ahora vos me des el primer beso de novios y el último que vaya a recibir en mi vida –los ojos se le llenaron de lágrimas- ¿qué me decís?

-  Lali: Peter yo… -lo miró con lágrimas-

-  Peter: no te pido que te cases ya conmigo, no te apuro ni me acobardo tampoco, pero quiero que estos anillos de compromiso, si vos aceptas, signifiquen una promesa de que nos seguiremos amando y eligiendo cada día y de que pase lo que pase siempre vamos a estar uno al lado del otro porque nuestros corazones están ligados de una vez y para siempre. Quiero que estos anillos sean una promesa que podremos cumplir en un futuro de casarnos y formar una familia como siempre lo soñamos…

-  Lali: -puso un dedo sobre los labios de él interrumpiéndolo- shhh, no hables más. Si quiero ser tu novia, tu prometida y algún día casarme y formar una familia con vos. Porque vos sos el amor de mi vida Pitt –sonrió y lo besó-

No necesitamos nada más para mejorar ni ayornar el momento. No necesitábamos nada más porque lo teníamos todo, felicidad, amor, y una promesa de que estaríamos juntos pase lo que pase. Yo lo besaba, sonreía y me sentía orgullosa del hombre en que se convirtió, sin dudas era él con quien quería pasar el resto de mi vida.

De pronto y sin previo aviso, besó mi mano, me colocó el anillo y después encendió la música y nos pusimos a bailar ese bonito tema de Axel llamado “Verte Reír”

FIN  DEL CAPÍTULO LVII

Wow creo que les dejo un capitulón no sólo por San Valentín (que técnicamente ya pasó) sino también porque estamos próximos a llegar a las 30 mil visitas, espero que los disfruten.

Y como siempre gracias por todo lo que pasamos juntos este tiempo, por leer la novela y comentar y por estar siempre siempre del otro lado. Son geniales sin duda alguna y los aprecio un montón.

Bueno, en realidad no me quiero poner sentimental así que ya saben comentarios, dudas, correcciones, etc, etc me lo dejan acá abajo o en mi twitter @yesi_xsiempreTA. Que tengan una buena noche, besos