"Inolvidable" Capítulo 10

“Algunas historias de amor”

-  XXX: ¡Viva los novios!

-  Lali: ¿qué haces acá Euge? –dijo apartándose un poco de Peter-

-  Euge: salí a pasear ¿qué pasa? ¿no puedo salir ahora? –miró para todos lados- linda plaza eh…

-  Lali: sí, sí ¿y cómo llegaste? Digo, queda un poco lejos de casa…

-  Euge: llegué y punto.

-  Peter: ¿nos seguiste? –preguntó abrazando por detrás a Lali-

-  Euge: ah bueno, posta que son novios ya eh –miró atenta como Peter se abrazó a Lali-

-  Lali: no, no somos novios –dijo sin quitar las manos de Peter-

-  Euge: no parece…

-  Peter: bueno, eso es de nuestra incumbencia. Ahora contéstame ¿qué haces acá? ¿nos seguiste?

-  Euge: sí los seguí –miró a Lali- porque te dije bien que este pendejo no es el indicado para vos, pero ya veo que caíste en sus redes. Mira que sos tonta Mariana eh, él no te quiere, va quiere una sola cosa de vos… -rió-

-  Peter: ¿de qué hablas Eugenia? Vos no me conoces en lo más mínimo, así que no hables de mi ¿ok? –se alejó de Lali y se acercó a Eugenia- ¿o qué te pasa? ¿estás celosa porque en vos no me interesé y a mí Lali me importa?

-  Euge: -riéndose- ¿yo celosa? Contate otra Lanzani ¿quién puede estar celosa de vos? Sos algo de una noche, lo mismo que seguro va a ser mi amiga para vos.

-  Lali: bueno basta Eugenia –la miró mal, se acercó y la tomo del brazo para alejarla- ¿por qué viniste? En serio parece que estás celosa ¿viniste para interrumpir las cosas? No te entiendo sos mi amiga y en vez de preferir mi bienestar venís para intentar interferir en todo, porque eso se ve ¿qué pasa? ¿te gusta? ¿queres algo con Peter? -la miró cuestionándola- Yo vine para tener una cita a solas con él, -agregó- como vos me habías dicho que haga, antes de enterarte que Peter, era el Peter que vos conoces. Y ahora parece que no queres que estemos juntos, juro que no entiendo.

-  Euge: Lali yo…

-  Lali: no Lali nada –dijo terminante- estoy cansada que vos y Gastón se quieran meter siempre en mi vida, si los dos están celosos, bueno arréglense ustedes porque yo ya soy grande y si quiero estar con Peter voy a estar. Y ni siquiera me importa lo que vos digas porque para mí Peter no es esa persona que decís, si lo fue, bueno lo fue, pero ahora es distinto y yo confío en él.

-  Euge: pero yo no quiero que…

-  Lali: no importa Eugenia mejor déjalo ahí… -se dio media vuelta- chau, que te vaya bien.

-  Euge: ¡Lali! –gritó pero a su amiga poco le importó-

-  Lali: -acercándose a Peter- ¿vamos Pitt?

-  Peter: -sonrió a penas- si vamos, te llevo a tu casa ya ¿queres?

-  Lali: bueno –empezó a guardar las cosas del picnic-

-  Peter: -la ayudó para terminar lo más pronto posible-

-  Lali: bueno vamos –intentó tomarlo de la mano pero él no la dejó-

-  Peter: vamos –se adelantó y fue a abrirle la puerta del auto-

-  Lali: gracias –sonrió y subió-

-  Peter: -algo desganado subió también- de nada –encendió el auto y manejó hacia su destino-

-  Lali: perdóname –se excusó- yo no quería que esto pase, pero Eugenia…

-  Peter: -la interrumpió- no importa Lali, ella por un lado tiene razón, yo siempre fui una basura y por ahí no se equivoca, tal vez yo no sepa cómo tratarte, tal vez estemos haciendo las cosas mal –se detuvo un semáforo y la miró- tal vez yo no sea el indicado para vos… -el semáforo se puso en verde y arrancó una vez más-

-  Lali: Peter ella no tiene razón –lo miró- detente ahí –le mostró un lugar vacío para estacionarse-

-  Peter: ok –se estacionó y luego la miró-

-  Lali: Peter ella no tiene razón, ya te lo dije por ahí vos te equivocaste, pero fue en el pasado y eso no quiere decir que vuelvas a hacerlo. Mírame –lo tomó de la barbilla- yo creo en vos, creo en que cuando me decís que te importo me lo decís de verdad y realmente me importa muy poco lo que digan los demás porque nadie ve lo que yo veo en vos ¿ok?

-  Peter: es que yo no quiero hacerte mal…

-  Lali: shh –puso un dedo sobre los labios de él- no me vas a hacer mal y si lo haces ya veremos. Dale nene no seas tan cobarde –sonrió y le dio un beso en la mejilla-

-  Peter: está bien –la miró a los ojos-

-  Lali: bueno ahora, vamos, pero no vayamos a casa, no tengo ganas.

-  Peter: ¿y dónde queres ir? –preguntó sin dejarla de mirar-

-  Lali: mmm… no sé, donde quieras –sonrió-

-  Peter: podemos ir a la costanera si queres, tengo ganas de estar en algún lugar tranquilo ¿puede ser?

-  Lali: estoy totalmente de acuerdo –sonrió-

-  Peter: bueno vamos –encendió el auto de nuevo- ah para antes quiero hacer una cosa…

-  Lali: ¿qué cosa?

-  Peter: esto – se acercó y la besó suave y tranquilo, pero esta vez sin ninguna interrupción-

Luego de eso manejé un poco más tranquilo a la costanera, pero aún todas las ideas no se habían disipado ya que me conocía muy bien y rara vez podía cumplir mi palabra. Y aunque ella fuera distinta sabía bien que yo era capaz de cualquier cosa muchas veces.

-  Lali: mira Peter aquel señor vende algodón de azúcar –le señaló-

-  Peter: -sonrió tierno mirándola- naa ¿en serio queres?

-  Lali: sí ¿me compras? –preguntó como niña pequeña-

-  Peter: dale –fue a comprar y luego volvió- toma hermosa –se lo dio-

-  Lali: gracias –se paró en puntas de pié y le dio un beso en la mejilla- sos el mejor

-  Peter: gracias –sonrió y la tomó de la mano mientras caminaban por la costanera- ¿nos quedamos acá? –se detuvo mirándola-

-  Lali: dale –sonrió- ay tengo frío –se hizo la tonta mientras terminaba de comer el algodón de azúcar-

-  Peter: uh pobrecita vení –la abrazó y le dio un beso en la mejilla- ¿mejor?

-  Lali: mejor –sonrió mirando el paisaje- Pitt

-  Peter: ¿qué? –preguntó en su oído sin dejar de abrazarla-

-  Lali: gracias –lo miró sonriendo- es una de las mejores citas que tuve…

-  Peter: también es una de las mejores citas que tuve.

-  Lali: Pitt –volvió a decirle-

-  Peter: ¿qué pasa hermosa?

-  Lali: ¿nos sacamos una foto?

-  Peter: dale –tomó el celular de él- pongámonos así –dijo mientras volteaban- así sale el paisaje, y… -sonrió- listo

-  Lali: a ver, a ver –tomó el celular de él y miró la foto- wow está re linda, aunque vos saliste un poco feito –sonrió-

-  Peter: ¿ah sí? –preguntó mirándola y mirando la foto-

-  Lali: si, mira, tenes arrugas, salís muy viejo –rió a carcajadas-

-  Peter: sos mala eh…

-  Lali: un poquito no más –le dio un beso en la mejilla y se sacó otra foto con él así- ahora si saliste hermoso.

-  Peter: vos sos hermosa –completó y la besó-

Desde lejos cualquiera podría haber juzgado la situación como una joven pareja que estaba festejando y disfrutando su amor, y aunque ellos apenas se estaban conociendo y aún no tenían ningún título, disfrutaban mucho el uno con el otro. Se sentían felices, únicos, en su propio mundo queriéndose como si lo hubieran hecho toda la vida. Disfrutándose como si hubieran pasado siglos lejos el uno del otro. Mirándose como si trataran de tatuarse en la retina cada sonrisa, cada mirada, cada mueca del otro.

-  Peter: te tengo que llevar ya –dijo mirando su reloj- ya es un poco tarde y pronto va a caer la noche.

-  Lali: -bufó- está bien, pero solo porque es un poco tarde.

-  Peter: eso ¿qué quiere decir? –preguntó mientras seguían caminando pero ya rumbo al auto-

-  Lali: que si es por mí no me voy más de acá –caminaba- me gusta mucho estar al aire libre y tu compañía no es tan molesta –bromeó-

-  Peter: así que no es tan molesta, bueno no te traigo más… -continuó el juego de ella-

-  Lali: no –sonrió- tráeme, tráeme, pero déjame acá y vos anda a tu casa.

-  Peter: bueno, chau, quédate sola entonces –caminó más rápido casi llegando al auto-

-  Lali: ¡Peter! –gritó acercándose a él-

-  Peter: ¿qué?

-  Lali: no me dejes sola –pidió en cuanto estuvo frente a él-

-  Peter: ni loco –la miró detenidamente y luego abrió el auto- bueno vamos…

Unas semanas después…

-  Lali: -entrando al departamento de él- ¿qué hacemos acá?

-  Peter: nada, es que ya sabes que tus amigos no me quieren ver mucho por tu casa, así que traje a la mía –cerró la puerta luego de que ambos entraron-

-  Lali: bueno… -contestó mientras recorría la casa de él- muy lindo depto.

-  Peter: sí y sorprendentemente está un poco arreglado.

-  Lali: sí, pensé que iba a estar un desastre esto –terminó de recorrer y volvió a donde estaba él-

-  Peter: estaba un desastre en la mañana, pero mi hermano va a venir más tarde a hablar conmigo y no puedo tener todo tirado.

-  Lali: ¿en serio viene tu hermano? Qué bueno lindo, me encanta que se den una oportunidad…

-  Peter: sí, gracias –la abrazó- gracias por ayudarme y animarme a hablar con él.

-  Lali: es todo mérito tuyo eh… yo sólo te aconsejé –se soltó de él y empezó a dar vueltas por el living-

-  Peter: ¿te pasa algo? –preguntó algo confundido-

-  Lali: no, nada –dijo haciéndose la tonta-

-  Peter: si es porque te traje acá, yo no pienso desubicarme eh… te traje para que estemos tranquilos nada más –aclaró-

-  Lali: igual si era por eso, yo no te iba a dar lo que sé que queres… -se sentó en el sofá-

-  Peter: ¿y qué quiero? –se sentó junto a ella-

-  Lali: -sonrió- amor…

-  Peter: sí, mucho amor quiero –se acercó a ella-

-  Lali: -puso sus manos alrededor del cuello de él- pobrecito… igual yo no te lo voy a dar.

-  Peter: qué mala novia sos –roso sus labios con los de ella-

-  Lali: yo no soy tu novia nene –le dio un beso suave-

-  Peter: mmm –la besaba- Lali…

-  Lali: ¿qué? –preguntó sin dejar de besarlo-

-  Peter: ¿queres –beso- ser- beso- mi –beso- novia?

-  Lali: -se separó y lo miró- no, dijimos que es mejor no ponernos títulos…

-  Peter: pero yo quiero ir al club y que los pibes me digan vamos a salir y yo le diga no porque mi novia no me deja –sonrió estirando la trompita-

-  Lali: ¿por eso no más? –se mató de la risa-

-  Peter: por eso no más –rió con ella-

-  Lali: bueno, puede ser…

-  Peter: ¿eso –pico- es –pico- un –pico- si?

-  Lali: mmm –pensó- si…

-  Peter: ¡sí! –sonrió ampliamente- sos muy fácil de convencer novia –la llenó de besos-

-  Lali: no te creas eh… mira que te mandas una sola Lanzani y chau eh, no ves más mi hermosa carita –bromeó-

-  Peter: bueno linda, me portaré bien –rió y le dio un pico-

-  Lali: te voy a tener muy cortito nene eh ¿correrás el riesgo?

-  Peter: claro –dijo seguro- con vos me arriesgo a lo que sea, ahora –la tomó de la cintura y la sentó sobre sus piernas- dame un beso nenita.

-  Lali: lo que usted pida novio –sonrió y lo besó tiernamente, empezando así su nueva relación con él-

Ese día lamentablemente el hermano de Peter no fue porque según él había pasado algo, cosa que Peter no creyó mucho y sintió que no quiso ir porque aún no lo perdonaba, pero yo me encargué de borrarle esas ideas ya que tal vez era cierto lo que dijo Juan Pablo y simplemente no pudo ir.

Después de una larga charla, decidimos preparar la primera de las muchas cenas que tendríamos de ahora en más como novios. Luego la disfrutamos entre risas, charlas, chistes y las típicas tonterías que siempre hacíamos.

-  Peter: ¡Mariana te voy a matar! –miró su ropa toda mojada-

-  Lali: ¡ups! –rió- perdóname hermoso –lo abrazó y puso sus manos mojadas en la espalda de él-

-  Peter: me pedís perdón y me seguís mojando nena –dijo tratando de hacerse el enojado, pero riendo a más no poder-

-  Lali: es que creí que necesitabas un baño –rió-

-  Peter: apa, llevamos unas horas de novios y ya me queres bañar… -rió-

-  Lali: mira si te voy a querer bañar, -sonrió dándole besos-

-  Peter: ¿y por qué me mojaste entonces? –siguió los besos de ella-

-  Lali: porque me quería reír de vos un rato –aseguró riendo-

-  Peter: ah, sos de lo peor, ahora vas a ver –se soltó e intentó mojarla-

-  Lali: no, pido, pido. No tengo nada seco para ponerme si me mojas.

-  Peter: está bien, pero esto no queda así Marianita –le amenazó mientras se iba a su cuarto riendo malévolo-

-  Lali: no te tengo miedo Lanzani –concluyó mientras guardaba los platos que acababan de lavar y secar. Después se secó bien las manos y se acercó a la pequeña biblioteca que él tenía- mmm… no… -leía cada uno de los títulos pero ninguno lograba llamar su atención- algunas historias de amor… antología anónima –leyó en el libro que quitó del último anaquel-

-  Peter: -apareciendo con una remera limpia- ¿qué haces con eso?

-  Lali: no sé, me llamó la atención ¿no lo podía tocar? –preguntó preocupada-

-  Peter: sí –sonrió- ¿queres llevarlo?

-  Lali: no, quiero que lo leamos, va si queres.

-  Peter: bueno –se tiró en el sofá- ven entonces…

-  Lali: -se sentó junto a él- y empezó a leer: “He hecho esta antología con el fin de recopilar algunas historias de amor que han movido al mundo y que no tienen nada que envidiarle a Romeo y Julieta. Porque el verdadero amor no es el que subyace bajo las palabras de un buen libro, si no aquel que se vive, que se siente. El verdadero amor es aquel que trasciende el espacio y el tiempo y logra definirte. Así que si andas con el alma herida y buscas enamorarte este libro puede cubrirte bajo sus hojas, pero sí en cambio estás enamorado y no sabes aún del amor, alguna de estas historias pueden llegar a servirte.

Te desafío a que encuentres la historia que logre definirte. Así que elije la que prefieras. Lo entretenido es que no importa bajo que palabras se esconda, el amor siempre se hace notar en cada historia...”

-  Peter: ah bueno… -sonrió mirándola-

-  Lali: qué copado ¿ya leíste el libro?

-  Peter: no, ni siquiera recordaba tenerlo. Tal vez me lo regalaron –lo tomó y buscó alguna nota pero fue en vano- bueno elijamos una historia ¿dale?

-  Lali: dale –leyó los títulos- me gusta este –siguió con el dedo índice la línea de puntos- página 88 ¿lo lees vos, o lo leo yo?

-  Peter: lo leo yo… -la miró y empezó a leer-

“Amor Laberíntico”

Había una vez en el antiguo valle del Loira, Francia, un embajador francés en Italia y ministro de finanzas con el título de Controlador General de Guerra de Francia bajo las órdenes de Francisco I, llamado Jean Le Breton, el cual adquirió para sí las tierras de Colombier, donde erigió un chateau debajo del original del siglo XIV. Allí, tiempo después, el rey Felipe II de Francia se reunió en una ocasión con Ricardo I de Inglaterra para llegar a un acuerdo de paz en la Guerra de los Cien Años. 
El castillo permaneció en la familia Breton durante más de dos siglos, hasta que lo compró el Marqués de Castellane. Durante la Revolución Francesa, la propiedad fue confiscada y a principios del siglo XIX, Napoleón la compró para su hermano José.

-  Ann: fantástica historia querido, pero eso permanece en los libros de historia, no entiendo el por qué de agregarle el “había una vez”
-  Joachim: porque es más entretenida así, además porque le da un significado distinto a la historia.
-  Ann: ¿y cuál sería ese?
-  Joachim: que aún no ha acabado… -sonrió- déjame contarla hasta el final esta vez…
-  Ann: está bien, prosigue.

Dicho Chateau tiempo más tarde sería destruido y adaptado al gusto inglés, ya que se había vuelto muy difícil mantenerlo. Pero en 1906, cuando el médico español J. Carvallo adquirió el Castillo de Villandry, sus jardines revelaron indicios de décadas de abandono. Carvallo, entonces se dedicó inmediatamente a reacondicionarlos, restaurándolos al estilo original.

Así, el médico dedicó diez años de arduo trabajo para devolverle su esplendor, abrazando el misticismo castellano de la mano de Santa Teresa, San Ignacio de Loyola y San Juan de la Cruz. Su empeño dio sus frutos en su inauguración un 8 de agosto 1916, cuando por fin pudo contemplar ante sus ojos su sueño hecho realidad.

Luego de acabarlo pudo por fin dedicarse a su vida, y así conoció a una noble mujer de apellido Coleman, la cual lo enloqueció desde la primera mirada. Ellos habían coincidido en un baile donde sin saberlo se habían enamorado.

Después de un tiempo empezaron a vivir su amor. Por este motivo cada día al llegar la tarde los amantes cumplían un ritual. Ambos ingresaban a una de las áreas del jardín dedicado al amor. Este a su vez estaba divido en varias fracciones dedicados a diferentes amores, pero algo que compartían cada uno era un laberinto que los unía.

El laberinto podía llevarlos a cualquier área o incluso perderlos, cosa que ocurrió en varías ocasiones. Pero, siempre terminaban por llegar a la parte dedicado al amor tierno…

-  Ann: ¿en serio siempre llegábamos allí? Yo pensé que ese no era el amor tierno.

-  Joachim: sí, ciertamente es allí donde llegábamos. Porque tal vez estábamos destinados a encontrarnos siempre en ese punto donde el amor es realmente puro –concluyó sonriendo-

- Lali: fin -leyó y luego miró fijamente la foto del jardín que ilustraba la historia- ese jardín yo lo conozco.

- Peter extrañamente yo no solo conozco el jardín, creo que también conozco la historia... -la miró desconcertado-

FIN DEL CAPÍTULO X

Wow, cómo se viene la historia eh, cada vez más enredada y bueno la pareja cada vez más a los chapes jaja... Igual lo del enredo lo van a ir entendiendo de a poco.

Ahh y como verán la que quería interrumpir era Euge y si pensaron que se iba a quedar en el molde, aún no saben de lo que es capaz de hacer, y aunque no quiero que la odien (porque yo la re banco) debe haber un malo siempre ¿no?

Emmm por otro lado, lamento el haberme tardado en subir es que estoy con exámenes a full, andaba sin internet y además estoy enferma, por lo que se me hizo imposible subir. Y esta semana que viene se me va a hacer más imposible aún porque tengo 3 trabajos prácticos que rendir y un proyecto que preparar y presentar, todo para mitad de semana, por eso este va a ser el único capítulo de esta semana. Espero sepan entender.

Y bueno como siempre quiero saber qué les parece la nove, si les gusta o no, si quieren incluir algún personaje, si quieren cambiar algo, si tienen alguna duda o lo que sea. Así que por favor déjenme su comentario acá abajo o me lo mandan al twitter @Yesi_xsiempreTA.

Bueno y antes de olvidarme, también si queres que te avise o te conteste tu comentario al twitter déjamelo en tus comentarios. Siempre los estoy leyendo.

Y bueno eso es todo por hoy... Nos leemos pronto. Que tengan una gran semana :D